

Castro de Pedra Moura
Na parroquia de Borreiros, no seu límite coa parroquia de Donas, atopamos este castro onde se instalou un poboado castrexo na Idade do Bronce, que perdurou na Idade do Ferro até o século segundo da nosa era. Situado nun promontorio a 258 metros de altura sobre o nivel do mar, a súa ubicación estratéxica proporcionaba unha vantaxe defensiva e unha visión privilexiada do entorno, facendo deste un lugar ideal para os seus habitantes.
Durante a visita, poderá explorar os restos reconstruídos de tres vivendas circulares, que permiten imaxinar a disposición e as características das antigas moradas dos poboadores. Tamén se poden observar as fosas de diversas estruturas e os restos dunha muralla defensiva que protexía o asentamento.
O lugar ofrece tamén un espectacular miradoiro natural, cunhas vistas impresionantes ao Val Miñor, á foz do Miñor e á enseada de Baiona, que se estenden ante os seus pés. Este panorama, un dos mellores da zona, permite admirar a beleza da costa e a harmonía do interior, facendo que a visita ao castro sexa unha experiencia memorable tanto a nivel histórico como paisaxístico.
ACCESO: Pódese acceder en coche por pista forestal ata a zona do Castro. Despois débese camiñar uns poucos centos de metros por unha pista do monte, con abundante arborado de carballos e, sobre todo, piñeiros.
En la parroquia de Borreiros, en su límite con la parroquia de Donas, se encuentra este castro donde se asentó un poblado castreño en la Edad del Bronce, que perduró durante la Edad del Hierro hasta el siglo II de nuestra era. Situado en un promontorio a 258 metros sobre el nivel del mar, su ubicación estratégica ofrecía una clara ventaja defensiva y una vista privilegiada del entorno, lo que lo convertía en un lugar ideal para sus habitantes.
Durante la visita, es posible recorrer los restos reconstruidos de tres viviendas circulares, que permiten imaginar cómo eran las antiguas moradas del poblado. También pueden observarse las huellas de otras estructuras y los restos de una muralla defensiva que protegía el asentamiento.
El lugar funciona además como un espectacular mirador natural, con impresionantes vistas sobre el Val Miñor, la desembocadura del río Miñor y la ensenada de Baiona. Este panorama, uno de los más destacados de la zona, permite admirar tanto la belleza de la costa como la armonía del interior, haciendo de la visita al castro una experiencia inolvidable, tanto por su valor histórico como paisajístico.
En la parroquia de Borreiros, en su límite con la parroquia de Doñas, encontramos este castro donde se instaló un poblado castreño en la Edad del Bronce, que perduró en la Edad del Ferro hasta el siglo segundo de nuestra era. También conocido como Castro de Barcalla o de Las Pinceiras, se sitúa en un promontorio con una altitud de 258 metros sobre el nivel del mar, lo que sirvió como lugar de privilegio para sus pobladores. En su visita podrá disfrutar de los restos reconstruidos de tres viviendas circulares, de las fosas, de los restos de una muralla defensiva y de una roca con grabados milenarios. Mirador natural con maravillosas vistas al Val del Miñor,casi a nuestros pes a Foz del Miñor y la esnsenada de Baiona.
ACCESO: Se puede acceder en coche por pista forestal hasta la zona del Castro. Después se debe caminar unos pocos cientos de metros por una pista del monte, con abundante arbolado de robles y, sobre todo, pinos.
Características
Comentarios
Responder a carmen Cancelar resposta
Horarios
-
Lun
09:00 - 12:00
-
Mar
09:00 - 12:00
-
Mér
09:00 - 12:00
-
Xov
09:00 - 12:00
-
Ven
09:00 - 12:00
-
Sáb
09:00 - 12:00
-
Dom
09:00 - 12:00
carmen